Al asignar un verso a un compás musical, como hemos hecho con todos los vistos hasta ahora, como el octosílabo. el endecasílabo y otros, hemos asignado la primera marca rítmica al principio del verso y la última, el último acento, al final. Esto funciona, y ha permitido una gran cantidad de teoría y práctica útil y consistente.

Reconocido esto, sin embargo, siempre nos ha rondado la idea de que la asignación natural sería justamente la inversa; pero, ante la revolución que supone para estas páginas y su subyacente construcción teórico-práctica nos hemos amilanado una y otra vez.

Sin proponer por ahora esa revolución, queremos sin embargo publicar la idea para acicate, bien de nosotros mismos, bien de futuros exploradores de la ciencia del verso (que ya estoy encontrando, por cierto)..

La última marca debe ser el principio del compás porque es la más regular, la que se encuentra siempre en igual lugar y coincide con el acento, siempre. Es el eje rítmico. Es el candidato natural. Las demás marcas, las previas sufren diversas vicisitudes en sus relaciones con el acento, pero la última no. De este modo el principio del compás sería lo estable, la última parte del verso) y el fin lo variable, la primera parte del verso.

Así se resolverían algunos problemas, como los octosílabos variables en cualquier serie de ellos y las relaciones dificultosas de heptasílabos y endecasílabos de las estancias y silvas (heptasílabos a veces anapésticos, a veces yámbicos).

Tres compases de compasillo, 12 por 4.

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 12 _____________________________________________

º O º 0 º O º 0 º O º –

Tres compases de compasillo reordenados, con primera marca en 2ª

| 2 3 4 5 | 6 7 8 9 | 10 11 12 1 12 _____________________________________________

| O º 0 º | O º 0 º | O º – º

Tres compases de compasillo reordenados, con primera marca en 10ª

| 10 11 12 1 | 2 3 4 5 | 6 7 8 9 | 12 _____________________________________________

| O º – º | O º 0 º | O º 0 º |

- men- to dul‒‒ce_a‒rro-yue -lo de co-rrien-te

pla‒ ta _ cu ‒ya_a -gua_en-tre la hier-ba se di-

-la- - ta _ con re ‒ ga‒‒la‒do son.....

Todas las longitudes de verso quedan ahora unificadas en una perspectiva común; elegimos por sencillez una rejilla rítmica binaria (trocaica o yámbica)::

Tomando un aspecto rítmico fácil y unificado: compás de compasillo, 4 por 4 el primero; el segundo más complejo: 8 partes como 2 +3+3, por ejemplo.

Vuelta al Principio Última actualización: viernes, 18 de septiembre de 2015 Visitantes:

	Sílabas (Ori) n-1 n-2 n-3 n-4 n-5 n-6 n-7 n-8 n-9 n-10 n-11 n-12	Car
	Sílabas (Nue) 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
	Tetra O o * O o Penta O o * o O o Hexa O o * O o O o Hepta O o * o O o O o Octo O o * O o O o O o Enea O o * o O o O o O o Deca O o * O o O o O o O o Endeca O o * o O o O o O o O o	T Y T Y T Y T Y
Reordenación de las sílabas originales de los versos tomando la áultima acentuada como primera.

	Sílabas (Ori) 6 7 (8) 1 2 3 4 5	Car
	Sílabas (Nue) 1 2 3 4 5 6 7 8
	Hepta Yámbico O o * o O o O o (Quiero decir las) co ‒- sas * más tris ‒-tes es - ta (noche.) Hepta Anapestico: O o * o o O o o (La princesa está.) tris- te * qué ten ‒ drá la prin‒ (cesa.).
Reordenación de los dos tipos de heptasílabo.