Esta página está en construcción: perdonen los errores, repeticiones y temas inacabados.

This page is being developed: I am sorry for errors, duplications  and unfinished subjects.

 

Gran Teatro del Mundo. Somero análisis sintáctico. (incluido en Grupo Fundacional de Verso)

Al exponer una escena de GranTeatro, hemos detectado errores en el texto al chocarnos algunas inconsistencias en el texto. La vemos. Lo reorganizamos de acuerdo con el criterio expuesto en Reorganizar y recitar versos.
 
Contamos las frases
 
Contamos primero las frases  principales (oraciones, las que tienen un verbo, pero no las de relativo, que son como adjetivos que precisan o adornan un sustantivo o pronombre). Consideramos una sola las frases con las oraciones en que aparecen varios sujetos o complementos, unidos por  conjunciones de unión (y). Recordemos que las conjunciones unen frases, lo que nos advierte de esa naturaleza múltiple encubierta.
 
Nótese cómo la estructura de lo dicho se hace clara, aunque se empobrezca el resto. Desaparecen las circunstancias, las razones, las causas, los efectos... sólo los hechos desnudos, lo que está pasando, pasó o pasará.
 
1, Hermosa compostura... (incompleta)
2. Campaña de elementos ... (incompleta)
3. Tú ...
y   ...
4. tú, el Mundo...
5. ¿Quién me llama
6. ¿Quién me saca de mí?
7. ¿Quién me da..
8. Es tu Autor Soberano.
9. De mi voz un suspiro, de mi mano un rasgo es quien te informa,
    y
10. a su obscura materia le da forma.
     Pues
11 ¿qué es lo que me mandas?
12. ¿Qué me quieres?
13. Pues soy tu Autor, y
14, tú mi hechura eres,
15. la ejecución de un concepto mío a tus aplausos fío
16. Una fiesta hacer quiero...
    y
17. una comedia sea la que hoy ....
18. ...la ha de hacer mi compañía.
 
 
Análisis de frases largas
 
1. Dios no acaba su frase, sólo dice:  tú, que... tú que...  y entonces le interrumpe el mundo. Así que colocamos unos punto suspensivos al final de su parlamento. Es necesario para que el actor recuerde que interrumpe o es interrumpido y no acabe el parlamento con un punto (entonación conclusiva).
 
Va además con el talante de ambos personajes: Dios sentencioso, majestuoso, algo pesado aunque muy respetable.
El mundo, variado, pecaminoso como Estambul, decíamos en una clase, algo malhumorado, algo caprichoso, algo artista; más joven, necesariamente, frente a la eternidad de Dios. Es coherente que el Autor se enrolle algo, y que el mundo, práctico, le interrumpa. Luego ya se pone a tono y respeta.
 
2. La exposición del Mundo en octosílabos muestra las capacidades culteranas del autor (es la época), aunque sólo complica la construcción, no extrema los hipérbatons como Góngora:
Autor generoso mío,
        a cuyo poder, a cuyo acento obedece todo,
yo,
         el gran Teatro del mundo,
tendré todo cubierto y oculto de un negro velo
           primeramente
,         (para ) que sea un caos donde estén los materiales confusos.
                  porque es  de más contento y más gusto no ver el tablado
                          antes que esté el personaje a punto,
 
 para que en mí representen los hombres,
 y
 cada uno halle en mí la prevención que le impone al papel suyo,
 
 como parte obediencial,
    que solamente ejecuto lo que ordenas,
          que aunque es mía  la obra, es milagro tuyo,
 
aquella niebla
Correráse
y
dos luminares,
alumbrarán
para alumbrar el teatro
           (porque adonde luz no hubo no hubo fiesta)
el uno (es)
divino farol del día,
y
el otro
nocturno farol de la noche ,
     a quien ardan
mil luminosos carbunclos,
       que en la frente de la noche
           den vividores influjos.
huyendo el vapor obscuro,
 
 
Décima
 
Mortales
         que aún no vivís
            y ya
           yo
              llamoos mortales,
                pues en mi concepto iguales
                       antes de ser asistís;
             aunque mis voces no oís,
venid
        a aquestos vergeles,
            que, ceñido de laureles, cedros y palma
           os espero,
porque
        yo quiero
repartir
estos papeles
entre todos .
 
Contexto. Según explican ambos, Dios, autor de todo, quiere celebrar su grandeza y encarga al Mundo, director de escena, que lo prepare.

                       El gran teatro del mundo Calderón Acto I- ESCENA I

Sale el AUTOR con manto de estrellas y potencias en el sombrero.
 
AUTOR
Hermosa compostura
de esa varia inferior arquitectura,
que entre sombras y lejos
a esta celeste usurpas los reflejos,
cuando con flores bellas
el número compite a sus estrellas,
siendo con resplandores
humano cielo de caducas flores.
Campaña de elementos,
con montes, rayos, piélagos y vientos:
con vientos donde graves
te surcan los bajeles de las aves;
con piélagos y mares donde a veces
te vuelan las escuadras de los peces;
con rayos donde ciego
te ilumina la cólera del fuego;
con montes donde dueños absolutos
te pasean los hombres y los brutos:
siendo en continua guerra
monstruo de fuego y aire, de agua y tierra.
Tú, que siempre diverso,
la fábrica feliz del universo
eres, primer prodigio sin segundo,
y por llamarte de una vez, tú, el Mundo,
que naces como el Fénix y en su fama
de tus mismas cenizas...
              (Sale el MUNDO por diversa puerta.)
MUNDO
                                   ¿Quién me llama,
que desde el duro centro
de aqueste globo que me esconde dentro
alas visto veloces?           \da voces?
¿Quién me saca de mí? ¿Quién me
AUTOR
Es tu Autor Soberano.
De mi voz un suspiro, de mi mano
un rasgo es quien te informa,
y a su obscura materia le da forma.
MUNDO                           \ me quieres?
Pues ¿qué es lo que me mandas? ¿Qué
AUTOR
Pues soy tu Autor, y tú mi hechura eres,
hoy, de un concepto mío
la ejecución a tus aplausos fío.
Una fiesta hacer quiero
a mi mismo poder, si considero
que solo a ostentación de mi grandeza
fiestas hará la gran naturaleza;
y como siempre ha sido
lo que más ha alegrado y divertido
la representación bien aplaudida,
y es representación la humana vida,
una comedia sea
la que hoy el cielo en tu teatro vea.
Si soy Autor y si la fiesta es mía,
por fuerza la ha de hacer mi compañía.
Y pues que yo escogí de los primeros
los hombres, y ellos son mis compañeros,
ellos, en el Teatro
del mundo, que contiene partes cuatro,
con estilo oportuno
han de representar. Yo a cada uno
el papel le daré que le convenga,
y porque en fiesta igual su parte tenga
el hermoso aparato
de apariencias, de trajes el ornato,
hoy prevenido quiero
que, alegre, liberal y lisonjero,
fabriques apariencias
que de dudas se pasen a evidencias.
Seremos, yo el Autor, en un instante,
tú el teatro, y el hombre el recitante.
MUNDO
Autor generoso mío,
a cuyo poder, a cuyo
acento obedece todo,
yo, el gran Teatro del mundo,
para que en mí representen
los hombres, y cada uno
halle en mí la prevención
que le impone al papel suyo,
como parte obediencial,
que solamente ejecuto
lo que ordenas, que aunque es mía
la obra, es milagro tuyo,
primeramente porque es
de más contento y más gusto
no ver el tablado antes
que esté el personaje a punto,
lo tendré de un negro velo
todo cubierto y oculto,
que sea un caos donde estén
los materiales confusos.
Correráse aquella niebla
y, huyendo el vapor obscuro,
para alumbrar el teatro
(porque adonde luz no hubo
no hubo fiesta), alumbrarán
dos luminares, el uno
divino farol del día,
y de la noche nocturno
farol el otro, a quien ardan
mil luminosos carbunclos,
que en la frente de la noche
den vividores influjos.
....
 
AUTOR
    Mortales que aún no vivís
y ya os llamo yo mortales,
pues en mi concepto iguales
antes de ser asistís;
aunque mis voces no oís,
venid a aquestos vergeles,
que ceñido de laureles,
cedros y palma os espero,
porque yo entre todos quiero
repartir estos papeles.

 


Vuelta al Principio  Última actualización:  Monday, 16 de December de 2013  Visitantes: contador de visitas