Hemos iniciado el tema en Parentescos Versales. Insistimos sobre todo en el parentesco yámbico, que podemos llamar impar, porque emparenta, hepta, endeca y los menos frecuentes tri, penta, enea en las cortas, trideca (13), y mucho más.

Esta combinación de versos ha venido a dar variedad a la poesía moderna, queremos decir en el siglo XX;. veamos algunos ejemplos, escribiendo en cada verso la medida silábica

J. A. Valente: Ramblas de julio, 1964. (comienzo)

11               Me pregunto qué queda de esta tierra,

5                 de ayer, de hoy mismo,

7                 de hace un momento apenas.

7-7              de nuestra propia juventud a punto de no serlo

9                 ya nunca más y para siempre.

A. Martínez Sarrión: Mais où sont le neiges d'antan?. (fragmento entre muchos heptasílabos

7                no basta ya el revoco

7 - 7           aún menos corregir el ángulo de tiro

7 - 7 - 9      o lubricar la rosca - de arandela que abre - la boca del silenciador.

J. L. Panero: Poeta de Alejandría. (comienzo, entre muchos heptasílabos y algún raro octosílabo)

11               Nadie acompaña cuando cae la tarde

5                 su soledad,

7 - 7            ninguna mano presta fugitivo calor

7 - 7            a quien lento camina, perdida la mirada

11               hacia el lugar donde la luz de agosto

5                 aún le protege.

Organizamos los verso largos como combinaciones de otros más cortos, todos de métrica impar, como extensiones del alejandrino.

De esta manera se consigue una cierta sensación de libertad métrica, rompiendo la repetitividad del los versos de un solo tipo en el poema, pero conservando una pulsación que no es más que una fidelidad al pie o cláusula yámbica.

Los poetas de esta época se liberan, sí, pero conservando fiertes lazos con la tradición desde el siglo de oteo en adelante.

No son versos libres, únicamente liberados de la uniformidad.

Nos preguntamos ahora si aparecen asimismo combinaciones de métrica par, la basada en troqueos. No parecen frecuentes pero las buscamos igualmente.

Vea ahora una visión musical por compases de lo anterior, en Parentescos Versales III.