Cláusulas en el endecasílabo (incluido en Grupo Fundacional de Verso
Puede concebirse el endecasílabo como cinco yambos (más uno cataléctico si acaba en palabra llana). O, como medimos nosotros, como 3 diyambos o dobles yambos, en tres compases de compasillo (4 partes).
Pero la métrica interna, la del texto, crea mediante la sintaxis grupos rítmicos diferentes, siempre cambiantes, pues siempre el texto es diferente en cada verso.
Estas divisiones crean grupos rítmicos, cláusulas que coinciden o descoinciden con el patrón rítmico elegido, el que que llamamos métrica externa. Y estas discoincidencias crean encabalgamientos internos al verso, animándolo y variándolo: musicalizándolo.
Creando sólo dos partes en el verso contamos con las siguientes posibilidades:
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
1 ( º O ) ( º 0 º O º 0 º O º + ) 2 ( º O º )( 0 º O º 0 º O º + ) 3 ( º O º 0 )( º O º 0 º O º + ) 4 ( º O º 0 º )( O º 0 º O º + ) 5 ( º O º 0 º O )( º 0 º O º + ) 6 ( º O º 0 º O º )( 0 º O º + ) 7 ( º O º 0 º O º 0 )( º O º + ) 8 ( º O º 0 º O º 0 º )( O º + )
Las primeras cláusulas son sucesivamente: yambo, anfíbraco, y combinaciones de ellos después.
Observamos cómo, para el modelo yámbico ambas cláusulas son opuestas en su final: si acaba en marcada, comienza por no marcada, lo que las enlaza complementariamente (claro, reconstruyen el patrón total, que ya estaba equilibrado.
No incluimos particiones que no incluyan una de las marcas yámbicas, porque no conocemos un cláusula sin marca.
Cualquiera de ellas puede a su vez dividirse, generando otras más pequeñas.
Otra categoría la constituyen las encabalgadas, con tamaños potencialmente mayores (pueden alcanzar hasta dos versos, o incluso más, y disposiciones más variadas, ya que incluyen la pausa versal.
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actualización:
Thursday, 21 de February de 2013 Visitantes: