Íbamos a escribir psicológico, pero esa palabra, que significa o significaba algo parecido, está ya demasiado usada, y no bien. Vaivén anímico pues. Nos referimos a esa continua alternancia de reposo y anhelo. Como sucesión circular que se muerde la cola, puede principiarse en anhelo o en reposo.
Anhelo: tensión, deseo, necesidad, mono, pulsión, búsqueda, movimiento. Reposo: distensión, relajación, satisfacción, calma.
Entre ambos polos nos movemos continuamente, pues el anhelo requiere la satisfacción, pero inversamente, la satisfacción echa pronto de menos el anhelo: Como un ying-yang cada uno lleva en sí el germen del otro. El anhelo es en sí mismo reposante y el reposo es anhelante.
Esta pareja opera en muchísimos aspectos del alma humana (si 'alma' queda naif, léase psique), con nombres específicos, como hambre-saciedad, lujuria-satisfacción, sueño-reposo, cansancio-descanso, ambición-logro. En realidad hay nombres precisos para el anhelo, y pocos para su compañero. Quizá `porque el anhelo está alerta, vigilante, introspectivo, crítico, mientras que el otro, satisfecho, se limita a gozar de la vida, sin problemas. Así deviene un centro difuso y algo tonto rodeado de seres activos muy definidos y coloreados, muy vivos, que le rodean y pinchan, por decirlo así,
Porque recordar todo esto que es del dominio común?
Porque este vaivén es el gancho para que la forma, el arte, prendan al espectador, oyente, lector. Sólo si la forma y el arte llevan en sí, por medios sensoriales o mentales esta alternancia, ´es capaz la obra de poner en movimiento al contemplador , de e-mocionarle.
He aquí algunos pares específicos de la forma en varios campos. Esos pares han de ser metáfora del par anímico correspondiente, arrastrando al espectador al laberinto de esa rueda sobre la que giramos.
Consonancia-Disonancia Complejidad- Simplicidad Dificultad- Facilidad Multiplicidad - Parsimonia (o Poquedad) Redundancia- Economía.
Este vaivén debe realizarse, como todo, con una cierta regularidad, con un ritmo, que se nos aparece ahora enriquecido como un vaivén que retorna a intervalos similares, una idea que ya se apuntaba en A NUMERICAL THEORY OF RHYTHM,
al hablar de buen ritmo (good rhithm). Es decir, en el ciclo rítmico es esncial que exista ese vaivén citado, de tal manera que se producen dos saltos en el vaivén, de tensión a reposo y de reposo a tensión. La situación concreta de ambas zonas dará lugar a diferentes tipos de ritmo, pero en general, creemos que suelen polarizarse hacia los extremos del compás que lo contiene (o bien, el compás se ordena de ese mosdo), suiend lo más normal, que el reposo ocurra al principio y la tensión al final. Aunque el duyek turco y el ritmo de la clave colocan la disonancia al principio..
Vuelta al Principio Última actualización:
Tuesday, 09 de July de 2013 Visitantes: