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Retorno siempre en el Arte (incluido en Conversaciones con Roberto, Javier y Penélope)
Un encuentro fortuito, un fracaso transmutado en éxito, una flor amarga convertida en cera, nos permite avanzar algunas conclusiones provisionales sobre temas aflorados (en más de un sentido) en el punto 12 de Sobre todo a cuatro bandas. Como guión de memoria que es anunciamos ya un cierto deslabazamiento.
Siempre. Toda obra comienza exponiendo el inicio que es la referencia. Después se aleja, se varía, se viaja, se sufre. Después se retorna. Y ése es el final.
¿Pero todas las obras hacen lo mismo ?. Todas.
Por ejemplo, el tema B de una sonata, que retorna, pero en la tonalidad del A (por convención, por política o por satisfacción propia). Retorna pero cambiado, renovado, harmonizado. De modo que también toda la exposición retorna en la reexposición, pero cambiada, harmonizada. Incluso a veces (Schubert) también A retorna cambiado. El retorno se produce tras un largo viaje iniciático.
Por ejemplo las novelan buenas: Balzac, Dickens, Dostoyevsky...¿Y Rayuela, (¡oh, libro de cabecera de nuestra España madrugadora!) que ofrece caminos de lectura alternativos?.
Esa novela ‒experimental, cuca, no novela natural sin pose‒- se comporta como un cuadro: en las Meninas, es el espectador quien circulará sobre le cuadro hasta que realiza en su psique el trío sagrado A-B-A'. Ah, ahí se necesita la complicidad del lector, complicidad asegurada pues que comparte el modelo y las necesidades ‒perentorias‒ de la percepción satisfecha. El lector, obligingly, detendrá la lectura tras algunos vericuetos de modo que sienta que retorna. Cuando sienta que retorna, no antes (si se aburre o empacha, la transmisión y con ella la propia obra ha fracasado). Él configura ‒-cómplice‒- el trío A-B-A'.
El Retorno regular es el Ritmo. El irregular la idea, el tema, el diseño.
Nos inquieta Messiaen, quien decía que le ritmo no se repetía. Y vemos que el rimo vivo realiza cada retorno (cada ciclo o compás) de manera algo diferente. Suficientemente parecida para que se perciba y reconozca el retorno: pero suficientemente diferente para que nos traiga sorpresa y vida.
El retorno se da siempre en la mera consolidación del Mundo, la Realidad de
AGC. Sólo reconociendo, asintiendo a la nueva ocurrencia y
asignándolo a un
ente anterior (que así retorna) revalidamos en mundo, suelo necesario para
vivir. Incluso cuando la realidad de agrieta y muestra la tierna y roja carne
de lo nuevo, la herida, rápidamente la piadosa madre realidad cubre la herida
de piel suave y protectora, primero tierna y blanca, luego correosa y
resistente como piel de rinoceronte, englobando y asegurando: es la Palabra,
el Verbo, creador de mundos.
Entonces ¿esto es una Ley?
Las leyes son, cuando no han llegado todavía al empaque de tales, cuando jóvenes, meras regularidades. ¿Y qué es lo regular? Algo que se produce consistentemente, repetidamente. Luego el concepto de Ley trae como un eco, el de Retorno.
A-B-A'
Así hacía Jaqueline Dupré con el cello. Así le dijo (con el estilo de coña del jazzista nocturnal Art Blakey a Michel Camilo. invitado a tocar con el primero por el primero, dice el segundo. "¿Qué tocamos?" Y Art ""Mira, esto no funciona así." "¿Pues cómo". Art: "Cava tu tumba y entiérrate en ella".
Pues eso.
Pero me apresuro para atajar conclusiones apresuradas de los ingenuos.
Tras conocer, técnica de piano, los standards comunes, los ritmos, los estilos, el lenguaje de la improvisación, la harmonía (en en el nivel de los Jazz Messengers)... etc. tras eso hay que enterrarse. Si se hace sin todo ello, uno no resucita, renovado, queda enterrado para siempre
Muy importante el matizar que la igualdad está muerta. el parecido vivo y dinámico: de parecido en parecido voy de Arenas de San Pedro a Londres. De parecido en parecido va el niño Pedrito a D, Pedro en su lecho de muerte, siendo el mismo y siendo diferente
De modo que en toda obra que se precie (porque hay muchas que intentan no atenerse a estas leyes ) y por eso serán castigadas por el juicio general del tiempo‒- establecerá de manera propia 'Qué- retorna y 'Cómo' retorna. Ag
y estará ‒vaticinamos‒ la novedad, no en la violación de una regularidad siempre ‒-en todo generalidad‒- respetada. ^Porque. deducimos. se corresponde, icónicamente, con la naturaleza de la percepción humana, con la anatomía y fisiología de nuestra ser.
Y qué es lo humano ‒sospechamos..
Lo humano es lo que los humanos hacen, dicen y sientes.
Nada humano me es ajeno, decía el sofista
retorno final ‒hay otro retornos intermedios, que por ser parciales, no retornan del todo, sólo recuerdan y amagan‒ queda marcado por un retorno general. Conm plqatillos, pero que introduce variación, experiencia, vida acumulada: el tema b vuelve junto al a, pero se adapta a la tonalidad del primero (a veces también a se adapta en la vuelta, como hacía a veces Schubert)
Primero hubo la montaña. luego no hubo montaña. finalmente hubo montaña.
Pero ¡qué montaña, ésta última!.
Pues eso.
Vuelta al Principio Última
actualización: viernes, 18 de septiembre de 2015
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