Esta página está en construcción: perdonen los errores y temas inacabados.

This page is being developed: I am sorry for errors and unfinished subjects.

Espacio continuo de tono 2 (incluido en Conversaciones con Felix Sierra)

La obra de nuestro visitante titulada precisamente Glissandi aplica las ideas anteriores explorando glissandi varios entre notas que podemos llamare estables en este concepto.

Una primera audición aproximada nos ha indicado ya que, pese al propósito definido de que el glisando sea estructural, el oído nuestro, bien por educación, bien por leyes auditivo-perceptivas, los sigue clasificando como efectos 4expresivos.

Lo primero, pues, que se nos ocurre, tomando como guía la percepción de la consonancia y la tonalidad en obras atonales, es emplear el glisando de manera diferente a su empleo como efecto o matiz.

Por ejemplo, una secuencia descendente de notas glisadas no hace más que aportar suavidad a un proceso ya sugerido por el descenso, deviene un efecto, sobre todo si es rápido.

Así mismo, la frecuente presencia de notas estables hace aparecer las glisadas como notas con efecto igualmente.

Por estas y otras rozones que iremos pensando, una obra de tipo manifiesto, como lo era un poco la citada, debería ser más valiente y glisar casi todas las notas para que el oido no se refugie perezosamente en lo que conoce y se enbfrente a lo que no conoce.

Objeta el autor, sin embargo, que en bocetos anteriores había muchos más glissandi y que redujo su número porque su oído no admitía más. Quede ahí el punto.

Se nos ocurre, por otra parte, que el glisando estructural podrá ser percibido probablemente, e ionterpretado como un limar asperezas en un modelo que pasa por el diatónico, el cromático y el microtonal, ya que lo continuo no es concebible ni es codificable. Ya veremos.

En todo caso, las obras de Bach, como La Ofrenda musical, parecen abrir, a través del cromatismo, acvenidas nuevas y más ricas a la, por otra parte, excelente música bachiana de los conciertos y suites.

Pues bien, esta entrada al glisando o a su versión discreta microtonal, nos sugiere un paso parecido desde lo cromático, y nótese que, al igual que La Ofreda, es perfectamente compatible una música microtonal con la modalidad, sólo hace falta mantener una estructura clara de consonancias intercalada por disonancias más y m´ñas intensas.

Es decir, no hay porqué enlazar glissandi y microtonos con atonalidad y disonancia a priori, eso sería una elección, siempre que no fuera un capricho voluntarista.

 


Vuelta al Principio  Última actualización: Tuesday, 09 de July de 2013  Visitantes: contador de visitas