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Por qué no me gusta Cervantes  (incluido en Otras conversaciones)

Porque me hiere.

Cuando Don Quijote libera al zagal apaleado, este es golpeado después por venganza, y en un nuevo encuentro, increpa y se burla del hidalgo, nosotros, ‒al parecer seres débiles y sentimentales‒ , sufrimos. Sufrimos por la injusticia de la cosa, por no poder ayudar, por perjudicar a los otros, porque le mal prevalece y el mérito es ultrajado. Y no nos gusta.

Porque carece de poesía.

 El lo dice en el Viaje al Parnaso ("... me desvelo / por parecer que tengo de poeta / la gracia que no quiso darme el cielo"), y aunque sea quizá falsa modestia, es verdad. No hay lírica, no recordamos un solo poema que nos eleve, sólo ripios, versos 'aplicados', como prólogos, descripciones, sátiras y addenda.

Porque nos aboca a la desesperanza.

Cuando en La Entretenida, los amores incipientes o no, van fracasando por diversas razones, cuando todo queda inacabado, frustrado, insatisfactorio, nos hace dudar, nos hace, si no desesperar, sí desesperanzar, valga la palabra. Y cuando quien no fracasa en sus amores es porque nunca los tuvo, la cosa se hace demasiado fuerte (sólo el torerillo ama de verdad, pero es rechazado por impostor y por sin posición). Hasta el sainete queda inacabado, los sentimientos son malos, tibios o turbios. Todo insatisfactorio.

Por su escepticismo.

Los amores fingidos del Casamiento Engañoso, la amargura profunda del Coloquio de los Perros... Señor, ¡que tristeza!. Hay humor en todo, pero corrosivo como el vitriolo.

Porque refleja demasiado bien mucho de lo malo que pasa y nos pasa.

Por ejemplo, la joven esposo del Viejo Celoso le engaña a tutiplén (dejemos aparte el si pudo o no casarse con él). Vaya, lamentable es pero tiene sus razones. Pero es que la criadita también le odia y desprecia. ¿Por celoso, por autoritario? No, por viejo. Dice de él : "Ese Viejo, viejo". Y al objetarle "Pero él es bueno contigo". Responde la chica "Pero ¿deja por eso de ser viejo?". La pintura perfecta de nuestras reacciones la hace aún más crueles.

Ante lo malo y los males del mundo, ¿qué soluciones propone?. La locura (Vidriera, Don Quijote); la muerte (Numancia), el vacío (Entretenida), la tristeza (Coloquio de los Perros) , la falsedad y el desamor (Casamiento Engañoso..., El viejo celoso). Nadie se libra.

Esto cuestiona lo que esperamos (¿espero?) del arte: un mensaje de fantasía, consuelo, esperanza, fe...¿Algo así como una religión?.

Pues eso parece, y nos impresiona. Porque ¿no queremos saber la verdad?. Pues no. Y siento que las cosas, en este caso palabras e ideas, hayan tomado este derrotero. Pero, entonces esta página hace lo mismo, desvelar la verdad, la triste verdad. ¿Contradicción?. No, porque esta pagina no es arte, es información, es conocimiento de nosotros y del arte.

Nos da la impresión de que Cervantes canta las cuarenta a un mundo que no le ha tratado bien, ni lo ha hecho a otros. Y aunque tenga razón, aunque nos traiga unas verdades. aunque lo haga con maestría en la lengua y el ingenio,, no podemos, aunque le respetemos, amarle.

Con él, y otros de la época, nos duele España

Que no, que no me gusta.